CORPORACIONES TRANSNACIONALES

Y GLOBALIZACIÓN: EN EL CORAZÓN
DE LA OBSCURIDAD.

 

Federico García Morales

"I looked at him, lost in astonishment. There he was before me, in motley, as though he had absconded from a troupe of mimes enthusiastic, fabulous. His very existence was improbable, inexplicable, and altogether bewildering. He was an insoluble problem. It was inconceivable how he had existed, how he had succeeded in getting so far, how he had managed to remain--why he did not instantly disappear. 'I went a little farther,' he said, 'then still a little farther--till I had gone so far that I don't know how I'll ever get back. Never mind. Plenty time. I can manage. You take Kurtz away quick--quick--I tell you.'

(J.Conrad: The Heart of Darkness.  Part III).

 

Hace 100 años, ya no era un misterio la existencia de grandes corporaciones que operaban concentrando los capitales en el seno de la economía mundial. Su actividad era decisiva en la conformación de los espacios económicos . Se sabía que una extensa parte de la actividad colonial de países como Inglaterra, Francia u Holanda, se desarrollaba por cuenta y engrandecimiento de grandes consorcios. Se sabía también que existían fuertes lazos entre las aventuras productivas, comerciales y la banca y que igualmente, poderosos bancos señoreaban a las ramas industriales que comenzaban a integrarse. La conjunción de estas actividades daban lugar al fenómeno señalado como “imperialismo”. Entre los tratadistas que estudiaron estas situaciones se recuerda a J. Hobson (El Imperialismo) a Rudolf Hilferding (Finantzcapital), a Vladimir Lenin (El Imperialismo, fase superior del capitalismo). En años más recientes, esos análisis prosiguieron, pudiendo citarse entre los más notables a Fritz Sternberg (El imperialismo, Capitalismo o Socialismo?), Paul Baran y Paul Sweezy, (El capital monopolista ), Harry Magdoff (The Age of Imperialism), Ernst Mandel (El capitalismo tardío). En todas estas obras, la centralización del capital es analizada como una limitación de la competencia, como un proceso de sobrecapitalización, que incluso daba lugar a un excedente no realizable, que conducen al surgimiento de escenarios militares para la conquista de nuevos espacios de inversión y de apropiación, que en conjunto caracterizaba una política mundial cruzada de rivalidades interimperialistas, en una economía mundial en donde se compartían y globalizaban las crisis.

 

En nuestros días, frente al endiosamiento abstracto de  la globalización, vale la pena hacer una relectura de estas obras, para pasar  más adelante a considerar la extensión del trabajo concentrador de las grandes corporaciones transnacionales, que acaparan la mayor parte del producto mundial y que en su empuje, indudablemente, han venido a transformarse en el motor del fenómeno globalizante. Las corporaciones transnacionales son “el corazón de esa obscuridad”, porque al no incluirlas, evidentemente, la globalización queda como un concepto bastante obscuro, cuya lógica interna no se puede entender, o queda secreta, porque su principal protagonista se ha hecho desaparecer.

 

Si hay algo que en el pensamiento marxista  experimentó una fuerte represión, fue todo aquello que estaba ligado al concepto de producción y todo lo relacionado con la evaluación de las condiciones centrales de la producción capitalista. Hoy día puede decirse que no existe una reflexión consistente de la economía mundial que considere sus esquemas productivos.

 

En los Grundrisse, Marx señalaba que “no hay una producción en general ni una producción general. La producción es siempre una rama particular de producción —agricultura, ganadería, manufactura,etc.— o es una totalidad“.  Hoy, las formas productivas no se muestran en su particularidad y como totalidad, se muestra una globalización que no se reconoce como producción. Esto es, no aparece como una acumulación de fuerzas productivas y de relaciones de producción, ni como método de producción o forma social de producción. “La producción –agregaba Marx— no es nunca pura tecnología... ni es solamente producción particular. Es más bien un cierto cuerpo social, un sujeto social, que está activo a través de diversas ramas de la producción...” (Grundrisse, Introducción).

 

En este alejamiento de la versión productivista, pesó muy fuertemente la rígida esquematización del estalinismo, que ahogó la riqueza de este juego categorial --con tantas posibilidades de desarrollo—con la imposición estancada de los modos de producción, en catarata lineal. En los años 60, es cierto, se trató de rescatar la concepción dialéctica, más dinámica, en la rediscusión del “modo de producción asiático”, y la conceptualización del desarrollo desigual y combinado, que fueron creando espacios para el anclaje histórico de las formas sociales de producción.  Este avance teórico quedó interrumpido.

 

El gran desarrollo de las corporaciones transnacionales no dejó de afectar la teoría y con mucha frecuencia --antes de este paréntesis que al parecer ha llegado ahora a su fin—en vez de hacer teoría económica general, se comenzó a ver cómo el mundo real y la teoría eran afectados por esa hiperinflación corporativa. De modo que la política económica o la crítica a la política económica fue substituida por la justificación del accionar corporativo.

 

Estudiar la historia del capitalismo después de la Segunda Guerra Mundial, nos lleva inevitablemente a aplicar algunas reglas básicas que ya fueron utilizadas en el estudio de otras épocas en el desarrollo de este modo de producción.  Pero, con el alzamiento de formas productivas nuevas, surge la necesidad de establecer su especificidad,  como lo son el carácter de las nuevas contradicciones y sus expresiones sociales. En este sentido, sigue siendo una postura de avanzada el libro El capitalismo tardío de Ernst Mandel, publicado  en 1972, en el que toca el problema de la concentración internacional del capital, particularmente en el capítulo X.

 

Unos diez o quince años después,  el espacio económico comenzó a ser absolutamente copado por el término globalización, que muchos fariseos ávidamente quieren “aclarar” poniéndole el mote de “fenómeno complejo”. Pero, estas remitencias a la “complejidad” muy confortablemente forman parte  del repertorio de Tertuliano:” ignoramus ignorabimus.”

 

Más que un término, es una obscura mancha que se viene extendiendo al interior de la economía mundial y comienza a dominar el escenario y éste es el espacio productivo ganado por la gran corporación. De modo que lo que se indica como “globalización” no es otra cosa que la cutícula externa de una inmensa internacionalización concentradora del capital que tiene su sujeto activo en la Corporación Transnacional.

 

¿Y qué tiene que ver esto con el modo de producción capitalista como

totalidad o con la discusión sobre las formas sociales de producción?

La respuesta es que el contenido de la actividad de las CTNs (Corporaciones Transnacionales) sigue fundada en la extorsión de ganancias y la lucha por el alza de las tasas de ganancia y comparte las condiciones generales del método de producción capitalista, mientras el Sistema Mundial Corporativo --como forma social de producción-- hace surgir ciertas características que afectan a numerosos sujetos sociales y a una cierta orientación de la historia.

 De ellas indicamos:

  1. Las CTNs surgen como una línea de continuación de una

actividad del capital monopólico ya reconocida en la primera mitad de este siglo.

 

Hoy día todavía hay, engrandecidos, operadores financieros, que como el Banco de Boston o el Banco de Nueva York, tuvieron su punto de partida en 1784. Las Compañías de las Indias ya se constituían también con las características de las corporaciones transnacionales.

 

  1. Las CTNs se extienden, sobre todo a partir de situaciones

críticas que afectan al mantenimiento de las tasas de ganancia y responden a una cierta racionalización capitalista, hasta llegar a ser la forma lógica de organización del gran capital. Este desarrollo se da sobre un nuevo avance de las fuerzas productivas encaramadas en nuevas revoluciones tecnológicas; con una nueva organización del trabajo, al servicio de nuevos estadios de la competencia que se dan por lo general en el seno de un orden oligopólico. Se enlaza todo esto con  la tendencia a controlar mercados más allá de las fronteras nacionales y con nuevas maneras de construir ganancias extraordinarias que llevan a la disposición de grandes capitales con fuertes problemas de realización.

 

3.Las CTNs en su extensión internacional, explotan factores sociopolíticos favorables, como la quiebra del sistema del Este, la descomposición de los movimientos nacionalistas en el Tercer Mundo, etc., buscando expropiar a su favor el capital social.

 

4.Responden también –y esto se refleja en su estructura—a la

mayor centralidad en la acumulación del capital, que definió la situación hegemónica Trilateral. Las más fuertes CTNs tienen sus bases en los países centrales.

 

5.En un sentido vinculado estrechamente con el número anterior, las CTNs han crecido apoyando la hegemonía central en el control mundial de materias primas y energía.

 

6.Las CTNs crecen también controlando los diversos procesos vinculados con la realización internacional del valor, valores mercantiles en general y particularmente la fuerza de trabajo.

 

En este último sentido, uno de los misterios de la globalización

--que a veces se define en términos de “flujo de capitales o de inversión directa” hacia países periféricos-- queda explicado por la operación que provee mano de obra barata o materia prima o energía en condiciones ventajosas. La teoría de las ventajas comparativas se puede leer aquí al revés, como pasa también con los supuestos de la teoría de Heckscher-Ohlin, sobre el comercio internacional.

 

Las CTNs traen a escena una cantidad de rasgos muy significativos:

Son las mayores organizaciones económicas del mundo. Entre grandes y pequeñas, deben totalizar cerca de 40 000; el 90% de ellas con bases en el mundo más industrializado.  Su núcleo más poderoso, son unas trescientas y dominan completamente el escenario económico internacional. Según Greer y Singh, estas 300 bastan para controlar la cuarta parte del producto bruto mundial (“A Brief History of TNC’s”.)

http://www.corpwatch.org/trac/corner/glob/history/

 

200 de estas corporaciones en conjunto, tienen ventas que superan las economías sumadas de 182 países. De las 100 economías mayores del mundo, 52 son CTNs. ( Véase: Sarah Anderson y John Cavanagh: “Top 200:The Rise of Global Corporate Power”.)

http://www.corpwatch.org/trac/corner/glob/ips/top200.html

 

Es decir, con las CTNs estamos ante la forma económica más potente, más decisiva, en la marcha de los asuntos económicos mundiales.

La extensión del negocio corporativo es a veces difícil de conjuntar: controlan establecimientos que han heredado la dinámica concentradora de la preguerra, y han sumado la operación de nuevos establecimientos que extienden sus sucursales por todos los continentes (más de 250 000). Las CTNs son ya el sinónimo del pan de cada día, en la comunicación regular, telefónica, televisiva.  La opinión, es un construido que ellas forman y venden, pero también son sinónimo de desigualdad: sólo 200 concentran ingresos superiores a las 4/5 partes de la humanidad. Cuando se habla de Flujos de Inversión internacional, es sólo otro nombre de ellas. (Véase: “Inversión Extranjera en los Países en Desarrollo” de Mallapally y Sauvant)

http://www.beer.fi.cr/ci/infoenlace/mayo99/Inversio.html

 

En cuanto a su organización, sus ejecutivos por lo general son súbditos de alguna de las potencias de la Trilateral, esto es, EEUU, Japón o Europa.  En la aplastante mayoría de los casos, sus sedes, como también los principales tenedores de acciones están en alguno de esos países. No vayamos a pensar que los ejecutivos y la empresa de la AngloGold, que explota minas en Sud Africa, sea una empresa sudafricana, o que sus accionistas sean gente del Congreso Nacional Africano; tampoco que el presidente de la Ford sea un mexicano, porque allí se armen coches de esa marca.

 

Pero han traído consigo también una organización social del trabajo, que en una época asustó a ejecutivos y obreros norteamericanos cuando entraron a laborar en diversas empresas que las CTNs japonesas instalaron en los EEUU.  Después, claro, aprendieron.  Esta organización social del trabajo, que contiene rasgos de discriminación étnica, se mantiene mediante una encarnizada lucha en contra de los derechos de los obreros. Así, constituidas las CTNs en un período en el que se introduce la maquila en gran escala, lograron intensificar la explotación de la mano de obra. Todo ese proyecto hubiera sido irrealizable sin deprimir la actividad sindical o sin cooptar a las dirigencias sindicales corrompiéndolas profundamente. La decadencia del sindicalismo tiene su momento con la “globalización... corporativa”. Estas condiciones contribuyen generosamente a incrementar las “tasas de ganancia”.

 

En el terreno de las fuerzas productivas que controla la CTN, se da la bienvenida a “la fuerza de trabajo” que se pone al lado de la maquinaria o de los instrumentos de trabajo, otorgando su cuota al “aumento de la productividad” y dando pie a cierto discurso sobre “la calidad”. Pero también aparecen otros medios de producción en donde las revoluciones tecnológicas juegan el papel a que aludíamos más arriba –y tan frecuentemente citado por los tratadistas de la “complejidad”-- como la regalona favorita de la globalización. Aquí se dan diálogos y contradicciones entre la robotización y el trabajo en cadena, el crecimiento de la informática y el crecimiento del control de la “fuerza de trabajo” pero también, el surgimiento de una capa tecnocrática, adherida a las computadoras y a la alienación de sus circuitos. Con esto se adhieren nuevas formas de trabajo a destajo, como el cybertrabajo, junto con formas nuevas de comercialización, de dominio de los mercados  y de canalización de los capitales.

 

Vienen enfiladas aquí las relaciones de producción que contienen relaciones de propiedad extremadamente concentradas y concentradoras, que han abatido los antiguos intentos de reparto de la propiedad (por ejemplo las diversas reformas agrarias) y que a la vez, han ido acompasando la entrada de “las inversiones directas” otorgando vastas concesiones que afectan la propiedad raíz, aunque  transformando a la vez el valor de esa propiedad y originando la dispersión de poblaciones “innecesarias”. En este plan, se da este fenómeno que no puede calificarse de otra manera que como “neocolonialismo”.

 

En África, la extensión de las reservas y propiedades de las nuevas grandes CTNs, se miden en decenas de miles de kilómetros cuadrados para cada una. En Asia o en América Latina se observa la expansión propietaria en torno a las grandes explotaciones minerales, agrícolas y forestales. Nuevos intentos de parcelación que favorece al frente corporativo se han estado ensayando en los mares, océanos, flujos de agua y también en el espacio estelar y satelital.

 

El Sistema Corporativo construye pues, sus estrategias para aniquilar toda alternativa que se oponga a su desarrollo omnipotente; acapara todo lo que comunica la sociedad planetaria y a la vez, todo lo que mueve esa comunicación. Las CTNs buscan el dominio de los recursos petroleros, hidráulicos, eléctricos, nucleares. Son suyas las comunicaciones telefónicas e inalámbricas; se apropian de las vías férreas, de las carreteras; son los dueños del transporte marítimo y aéreo.  Pero también realizan su propia “reforma urbana”, y definen su perfil propietario de todos los servicios, desde el alcantarillado y la salud a los sistemas carcelarios. Estos espacios han sido conquistados mediante recias campañas “privatizadoras”. Se ve claramente de qué modo la situación del ciudadano queda puesta en entredicho ante este surgimiento totalitario. En el plano de la vida social, se le está enseñando en la práctica, que ya no tiene nada que hacer y lo que es peor, que tiene muy poco que esperar.

Luego, la situación de la propiedad y de la apropiación del trabajo, en las que las redes corporativas controlan una gruesa parte de la población activa --dictando las condiciones de su alienación—en donde el conjunto corporativo se recomienda restricciones salariales y  la forma de empobrecer a la masa trabajadora y de agregarla al ejército industrial de reserva. En este plan, empieza a distinguirse otro terreno donde las corporaciones ejercen su actividad: el terreno cultural.  Allí monopolizan la media e intentan hacer de la educación un aparato propio, interviniendo en la planeación, privatizando espacios educativos e impartiendo educación de servicio para el sistema que están entrando a dominar. (Lo vemos en los modelos educativos “italianos” de pacto entre el estado y la empresa).

 

Los mecanismos vinculados con las “relaciones de producción” se afirman mediante una operación política que las CTNs llevan muy eficientemente a cabo, y desde su nivel propio, el internacional, que dominan plenamente a través del estado imperial hegemónico (EEUU), los organismos internacionales  y el extenso pacto político que han logrado construir con las clases altas y medias all along the world.

 

En América Latina podría sorprender a un observador, el hecho de que en estos últimos meses, en todos aquellos lugares donde se están llevando a cabo campañas electorales, tanto los sectores oficiales como las oposiciones, manifiestan una absoluta resignación con respecto a la marcha del sistema, y que además, mantienen un silencio en relación al saqueo de que son objeto por parte de las CTNs. En cuanto a los que han estado gobernando, no pasan de ser empleados menores del sistema…

 

Es en este terreno político que se ha echado a andar la idea de que los estados --fuera de ser “estados de competencia”-- sólo tienen como función hacer más trasparentes sus fronteras para la entrada del capital transnacional, y no tienen otra cosa que hacer que impedir --en esta transición-- cualquier desarrollo de proyectos alternativos internos, que se ven como una subversión peligrosa. A esto se agregan también las sugerencias de que en este nuevo mundo “globalizante” ya no se necesita del estado. Todo lo contrario. Las CTNs están muy activas en la manipulación de la violencia y del autoritarismo de los estados, en una escala antes no conocida. Ellas llevan consigo una estructura autoritaria. Además, no hay que olvidar que ellas son las fabricantes y las dueñas de todo el arsenal del planeta, y que también han montado la organización que apoya la expansión y resguardo de sus intereses, con estrategias militares bien planeadas. Al respecto, está la experiencia de la expansión de la OTAN. (Véase: http://www.rcci.net/globalizacion/llega/fg081.htm

 

 

La política de los estados se encuentra ahora cortejada y limitada por toda una institucionalidad al servicio de la CTN, que se mueve muy hábilmente a través de las cartas de intenciones del FMI y las recomendaciones del Banco Mundial como de la Organización Mundial de Comercio. Hace poco hasta quisieron dar un paso definitivo con la creación del Acuerdo Multilateral de Inversiones, que se proponía facilitar un accionar descomunal y desmedido del las CTNs por encima de los estados. Una tendencia que será muy difícil de detener.

 

En los últimos 10 años, las condiciones del período habían favorecido en el interior de cada país, la compactación de un amplio frente pro CTNs, que llegó a tener su ideología o casi religión en el neoliberalismo. Detrás de la bandera de la globalización y la apertura de facilidades para las CTNs, se juntó a la burguesía vieja y nueva, a las clases medias o clases políticas. En un momento, la totalidad de los gobiernos estatales llegó a ser una avanzadilla del estado mayor corporativo. “Socialistas” incluidos.

 

Las CNTs, como forma tan particular de organización del mundo económico, tienen también otra característica que ha sido señalada muchas veces y que es imprescindible considerar: su actividad no sólo se refiere a la producción de mercaderías, ya que también monopolizan otras esferas, la comercial  y la financiera.  Al asumir el control del comercio mundial (en gran parte comercio intra-corporativo), se hacen cargo de una  esfera  que es mucho mayor que la productiva. Y es ésta una realización concentradora con grandes inversiones y ganancias, que  ha  redundado también en una serie de fenómenos que tocan de nuevo al área productiva. A través del monopolio comercial, del control del transporte, de los almacenes, de los mercados, ellas tienen la capacidad de fijar precios desestabilizadores a los medianos  y pequeños concurrentes. Por otro lado, al provocar la contracción de la demanda se generan problemas de sobreproducción; la inflación de precios y los altos intereses por el dinero, también contribuyen a deprimir la producción. Pero si se consideran algunas ramas del comercio internacional,  se verá por ejemplo, que con el control mercantil de toda el área de alimentos,  se ha destruido la soberanía alimentaria de una gruesa parte del mundo. La desertificación, la deforestación al servicio de los imperios de celulosa, la extinción de la vida en los mares, tienen mucho que ver con esto.

 

Y aquí entramos en la otra esfera desde la cual las CTNs dominan

todo lo demás: la esfera financiera. Hoy por hoy, muy pocos bancos,

junto con el juego de las bolsas y el manejo de las infinitas “deudas

externas”, definen todo el porvenir del sistema, con la posibilidad de

que la única fuerza que sea capaz de antagonizarlo, sean sus propias 

contradicciones y sus propias tendencias críticas, que como se  ha

visto en los dos últimos años, han ido desbordando muchos intentos de reequilibrio.

 

Otra característica de la expansión de las CTNs, vulgo “globalización”,

es la creación de graves y masivos problemas, que casi no encuentran

solución racional.  De éstos, se indican desde luego, el aumento del peso de las propias corporaciones y su accionar explotativo; la profundidad de las crisis que empujan desempleo y miseria; y por último, lo más grave: el desencadenamiento de la explotación y degradación sin limites de los recursos del planeta, al punto de poner a la vida misma en problemas extremadamente difíciles, porque le cierra los caminos hacia soluciones lúcidas. Hoy hemos llegado a la paradoja siguiente: si el hombre fuera naturalmente egoísta –como pensaban los liberales— pues sería socialista, pero socialista a la antigua. Es que ya no se puede apoyar la expansión de este sistema. Mucha gente se empieza a preguntar cómo ponerle un límite.

 

Pero aquí surge otra paradoja: siempre se ha sostenido y hasta se ha

evidenciado que el ser humano, cuando se propone tareas, es porque

las puede resolver. Esta vez se encuentra con que varios de los caminos, que en otras circunstancias hubiera podido tomar, se han ido cerrando.

 

 Por ejemplo, muchos opinan que ya es hora que se establezca un tratado internacional que condicione o ponga freno a esta expansión de las CTNs. Sin embargo, ahí apareció Kofee Annan llamando a las CTNs a enlazarse con las Naciones Unidas para que dede allí se apoyen mejor los objetivos corporativos.  (Véase:  “The Corporate Cooptation of the UN”.)

http://www.earthisland.org/eijournal/summer98/wr_sum98c.htm

 

Recientemente han surgido en diferentes países ciertos movimientos que impulsan renovaciones constitucionales, como ha sucedido en Venezuela. Y son éstas buenas medidas, pero tendremos que preguntarnos si la constitución que se aprobará en diciembre tendrá en su articulado --sobre todo en ese vago capítulo referido a la propiedad y la economía--  algún principio de protección de la economía frente al frenético empeño explotador de las corporaciones, pues hasta ahora, Venezuela prosigue subastando su patrimonio en sucesivas privatizaciones.  Por otro lado, Chile logró librarse del fundador de este modelo privatizador y pro-corporativo, pero ¿podrá ahora fundar una política alternativa no-corporativa, que sea capaz de enfrentar la destrucción a que lo arrastra ese dominio plutocrático?

 

En Argentina ya lograron sacarse esa vergüenza que era Saúl Ménem, pero ¿podrá ahora revertir todo el daño que hizo el establecimiento neoliberal privatizador y favorecer entonces, el empleo y el crecimiento del ingreso popular? Y en México ¿en qué quedó el proyecto de nación que iba a resolver la división del país de miserables y billonarios, o de las condiciones de su deuda desmesurada y la entrada triunfal de las CTNs?  ¿Cómo logrará salir Brasil del desastre al que lo condujo el neoliberalismo repentino y también desmesurado del exizquierdista Cardoso?  Y en otros países, como Rusia por ejemplo, que es llevada al destace por las grandes petroleras internacionales; o en África, donde ya se fue Mandela y nada ocurrió que separara a Sudáfrica y a los obreros sudafricanos de la sobreexplotación transnacional.

 

Sin embargo, como advertíamos, el sistema contiene en su seno la paradoja del socialismo, que por un lado, se da por muerto y enterrado, pero por  otro lado, sigue siendo la única alternativa al sistema corporativo, cuyo método económico ha enfatizado a grados extremos la desigualdad. Desigualdad que se da entre países y desigualdad en el seno de las diferentes regiones del planeta. En este plan, el sistema de las CTNs ha ido provocando el crecimiento de una masa humana empobrecida que no tiene paralelos y cuyo trayectoria y proyecto social, simplemente no coinciden con los intereses de las CTNs. Y en algún momento, inevitablemente, trayectos y proyectos se van a encontrar.

 

¿Qué extensión tiene este sistema de las CTNs? ¿Qué tan compacto es? ¿Qué se puede esperar de su continuidad?  ¿Cuáles son sus límites?

 

 

(Continuará:  Lea en el próximo número  la segunda parte de este trabajo sobre “La expansión de las CTNs”).

 

 

Enlaces que en donde puedes encontrar más información:

 

John Atkinson Hobson

http://www.spartacus.schoolnet.co.uk/TUhobson.htm

 

John A. Hobson: Imperialism, A Study.

http://www.fordham.edu/halsall/mod/1902hobson.html

 

V.Lenin: El Imperialismo fase superior del capitalismo

http://www.cruzio.com/~marx2mao/M2M(SP)/Lenin(SP)/IMP16s.html

 

K.Marx: Sectio 1 of the Introduction to the Grundrisse

http://home.mira.net/~deller/melt/grund1_1.htm

 

Samir Amin: “El capitalismo en la era de la globalización

http://www.planet.com.mx/macroeconomia/macro74/leccion.htm

 

The Debate on the International Capital Flow.Has liberalization gone Too Far?

http://www.stern.nyu.edu/~nroubini/asia/AsiaHomepage.html

 

Informe del Banco Mundial

http://www.worldbank.org/wdr/2000/

 

UNCTAD World Investment Report

http://www.unctad.org/en/pub/pubframe.htm

 

Attempts to control Transnationals

http://www.foe.org/progressive-economy/history.html

 

Multinationals

http://www.wdm.org.uk/background/multinat.htm

 

Transnational Corporations

http://www.dfg-vk.de/links/book52r.htm

 

Bibliografía sobre Transnacionales en América Latina

http://www.eclac.org/espanol/Publicaciones/inver98/Biblio.htm

 

E.Meiksins:”Unhappy Families:Global Capitalism in a World of National States”

http://www.monthlyreview.org/799wood.htm

 

P.Sweezy & Harry Magdoff: Stagnasjon og den finansielle eksplosjonen

http://www.akp.no/hefter/markedskreftene/sweezy92.htm

 

A Brief History of TNCs

http://www.corpwatch.org/trac/corner/glob/history/

 

Inventariando a las Transnacionales

http://www.corpwatch.org/corner/glob/guardian/

 

The BIG PICTURE

http://www.corpwatch.org/trac/links/links1.html - 3

 

GLOBALIZATION: The Facts

http://www.myfirstbillion.com/The_Internet/The_Internet_Portals.html

 

False Down: the delusions of global capitalism

http://www.marxist.com/economy/dawn.html

 

La cambiante presencia de las transnacionales en América Latina

http://www.eclac.org/espanol/Publicaciones/inver98/notatransnacio.htm

 

Bibliografía sobre inversiones extranjeras en Chile

http://ftp.lib.utexas.edu/Libs/Benson/bibnot/bn-82.html

 

Inversión extranjera en países en desarrollo

http://www.bccr.fi.cr/ci/infoenlace/mayo99/Inversio.html

 

Internet Modern History Source: Imperialism

http://www.fordham.edu/halsall/mod/modsbook34.html

 

Cursos en línea sobre Economía:

 

Global Economics and Global Crisis: A Tutorial

http://www.zmag.org/Instructionals/GlobalEcon/index.htm

 

Basic Concepts on Political Economy. A Virtual Course from Znet

http://www.zmag.org/Instructionals/Economics/default.htm

 

The Age of Imperialism

http://www.smplanet.com/imperialism/teacher.html

 

1999-2000 Connections World History course Online

http://connect.kpbsd.k12.ak.us/online/worldhist/outline.htm

 

RECURSOS EN ECONOMÍA: rcci.net/index.htm